Autor:
Rafael Pacheco
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(ayer: #362302)
Páginas: 197
Descripción:
?La visión del Santo de los Cielos me fue revelada, y escuché todas las palabras de los Vigilantes y de los Santos, y porque las oí, he aprendido todo de ellos, y he entendido que no hablaré para esta generación, sino para una muy lejana que está por venir.?
Enoc 1:2
París, Jerusalén, Roma, el Vaticano, los Alpes, la capital de Arabia, el Monte Ararat en Turquía, el desierto de Etiopía... Éstos son los escenarios para esta trepidante aventura en la que, en base a antiguos documentos reales, y un misterioso papiro por descubrir, el futuro inminente de la humanidad está por definirse, y desencadenarse.
¿Acaso las Sagradas Escrituras y los Textos Apócrifos nos han dado siempre la clave respecto a la verdadera naturaleza de Dios, o de AMBOS DIOSES?
Pistas, persecuciones, traición, amor, secretos; nada nos ha preparado para esta excitante aventura que nos llevará a los límites de la fe, la emoción y el misterio:
NOTRE DAME, PARÍS, 18 DE MAYO DE 1804.
Napoleón Bonaparte es auto coronado emperador, con la asistencia del Papa Pío VII. Sin embargo, dos años después, el Pontífice rechaza unirse al bloqueo en contra de Inglaterra. Además, el Papa es un obstáculo para que Napoleón controle a la Iglesia Francesa. Así, en 1809, Napoleón invade los Estados Pontificios, los anexa a su Imperio, y retiene prisionero al Papa.
En medio de tal inestabilidad de la Santa Sede, Napoleón ordena el traslado de gran parte de los documentos, cartas y demás manuscritos que, hasta entonces, eran propiedad del Pontífice. En 1814, finalmente, Napoleón abdica al trono, y el Papa Pío VII está ya en libertad, pero sin los recursos económicos necesarios para regresar la totalidad de los documentos.
Fue así como un número indeterminado de antiguos manuscritos terminaron envolviendo fruta y pescado en el mercado parisino, o simplemente se extraviaron. Poco a poco, a lo largo de más de dos siglos de búsqueda y rescate, algunos de esos documentos han sido recuperados, aunque no todos por la Santa Sede. Entre esos manuscritos se hallaba?
EL PAPIRO DE SIDAMO.
MONTES APENINOS, 120 KILÓMETROS AL NOROESTE DE FLORENCIA, ITALIA.
La zigzagueante carretera rodeaba elegantemente las verdes y maravillosas montañas italianas. Aquel Fiat apresuró aún más la marcha de su rápido recorrido. Cada curva debía de tomarla con mayor velocidad y menor margen de error. El leve rechinido de las llantas indicaba lo cerca que estaba de perder el control en las curvas. A pesar de su velocidad, el Maserati que le perseguía acortaba su distancia constantemente...
